Yo diría que Santa Marta está básicamente dividida por dos colinas en tres partes. Si estás en Santa Marta mirando hacia el mar, detrás de la colina a tu izquierda está El Rodadero, y detrás de la colina a tu derecha, encuentras Taganga.

Rodadero

El Rodadero es muy popular entre los turistas nacionales. De hecho, en temporada alta, que es de diciembre a enero alrededor de Navidad y en abril durante Semana Santa, está literalmente lleno de turistas nacionales, tanto que en esos momentos es difícil transitar en carro. También es una zona residencial muy popular, donde un apartamento estándar suele incluir piscina en el edificio, parqueadero, seguridad y, en algunos casos, gimnasio, sauna, zona de juegos para niños y más. Si te alejas del bullicioso centro turístico, es un buen lugar para vivir a largo plazo. Por ejemplo, Playa Salguero, una zona tranquila con una playa agradable, así como Rodadero Sur o Rodadero Reservado.

Lo que personalmente me gusta de Rodadero Reservado es que está cerca de las colinas, donde puedes salir a caminar temprano en la mañana, antes de que el calor apriete. Es una forma de estar en contacto con la naturaleza sin alejarte demasiado de la ciudad, algo que me parece muy único y que no se encuentra en muchos lugares. El camino te lleva a playas casi vírgenes como Inca Inca y Calderón. “Casi vírgenes” porque solo se puede llegar a ellas en barco o a pie; en carro es (casi) imposible. La playa de Rodadero es amplia y limpia, pero también muy turística. Aun así, creo que es lo suficientemente grande para todos, al menos para quienes no les molesta compartir el espacio con multitudes.

Taganga, Santa Marta

Taganga es un destino muy popular entre los mochileros, con calles sin pavimentar, una vibra hippie y lleno de centros de buceo. Diría que es el lugar ideal si quieres experimentar la “Colombia típica”. Quizás por eso es tan atractivo para los viajeros. Pero donde hay turistas, hay dinero, y donde hay dinero, puede haber delincuencia. Taganga ha tenido una mala reputación en la última década, lo que ha podido desmotivar a algunos turistas a visitarlo. Sin embargo, puedo asegurarte que no hay nada de qué preocuparse siempre y cuando no “des papaya”, una expresión colombiana que significa no exponerse innecesariamente o tentar demasiado la suerte. Por ejemplo, caminar borracho por una calle oscura en plena noche con el celular en la mano, una cámara colgada al cuello, joyas o un reloj caro… ya te haces una idea.

La gente en Taganga es muy amable y siempre te recibirá con una sonrisa, como es característico de los colombianos. La mayor parte de la playa en Taganga está ocupada por botes, ya que la mayoría de los centros de buceo, incluido nuestro Sony Dive Center, parten desde la bahía. Sin embargo, hay un espacio al costado de la bahía donde puedes nadar y relajarte. Si buscas una energía más tranquila y relajada, Taganga es definitivamente el lugar para ti.

Si decides quedarte en Taganga, te recomendamos una acogedora habitación en Casa Tara.

Santa Marta, Distrito Historico

Santa Marta es la ciudad de las oportunidades: oportunidades para invertir, crear y hacer realidad tus sueños. Mientras caminas por el centro histórico, no solo disfrutas de la belleza de su arquitectura tradicional, sino también de pequeños rincones llenos de artesanías, innovación y delicias gastronómicas. Por la noche, Santa Marta se transforma en una gran fiesta, de ahí la famosa frase: “Santa Marta es una locura.” Aquí no te quedas sentado en un solo lugar bebiendo; en cambio, bebes y bailas recorriendo distintos bares, incluso si no eres bailarín o bebedor, la energía simplemente te atrapa. Si quieres estar en el corazón de todo, el centro histórico de Santa Marta es definitivamente el lugar ideal para hospedarte.

Los Cocos

Los Cocos es un barrio de Santa Marta ubicado justo al lado del mar, cerca de la Marina Internacional de Santa Marta. Es similar a Rodadero, con numerosos edificios de gran altura, casi todos con piscina propia. La ventaja que tiene sobre Rodadero es su proximidad al centro histórico, ya que se puede llegar caminando, y su relativa seguridad (siempre sin dar papaya). Su playa es tranquila, aunque en temporada de lluvias el agua puede parecer turbia debido a la cercanía del río, que arrastra contaminación desde tierra firme. Cuando recién me mudé desde Europa, nadé allí porque finalmente vivía junto al mar, y no iba a perder la oportunidad de salir del apartamento, caminar dos cuadras y darme un baño en el océano.

Pozos Colorados

Y la última zona que, para mí, vale la pena mencionar brevemente es Pozos Colorados. Se encuentra en el camino de Santa Marta al aeropuerto. Está un poco más alejada, por lo que hay que aceptar el desplazamiento, pero es una zona muy tranquila, principalmente residencial y con hermosas playas largas.

No importa dónde decidas hospedarte, vale la pena tener un lugar de fácil acceso, ya sea en un balcón, una azotea o en la playa, para ver el atardecer, ¡ya que los atardeceres en Santa Marta son simplemente increíbles!